Querido coach:

Tú quizás no me recuerdes, fue hace unos cuantos años. Yo era uno de esos muchachos que salían el primer año de novato, sin la menor idea de como jugar fútbol americano, acuérdate.

Yo era aquel flaco alto que era un poco más lento que los demás.

Todavía no me recuerdas? bueno yo si te recuerdo bien. Recuerdo lo asustado que estaba cuando tú aplaudías y gritabas “Golpea”, recuerdo como te burlabas de mí y de los demás como yo, cuando fallábamos o cuando nos golpeaban de más en el entrenamiento.

Como ves, casi nunca me dejaste jugar en los juegos, de vez en cuando, si a los titulares les estabas dando pizarrón, me dabas chanza de jugar unas jugadas en los scrimmages, con los que éramos banca.

Yo realmente te admiraba, todos lo hacíamos, pero ahora que soy mayor y un poco más listo, quiero que sepas que me decepcione de ti. Después de esa temporada dejé de jugar fútbol americano. Tú me convenciste de que yo no tenía lo suficiente para ser un buen jugador, que me faltaba agresividad.

Recuerdo el primer entrenamiento, tú le llamaste a los linebackers, yo quería ser linebacker, la primera vez que intenté taclear a alguien, me arrancaron el casco, todo lo que hice fue bajar mi cabeza y golpear, claro, sin técnica, no hay tacleada.

Tu te carcajeaste, me dijiste que yo debería ser quarterback, porque tacleaba lo mismo que un quarterback, todos se rieron, fuiste muy gracioso.
Otro día que estaba jugando como guardia fallé en una tacleada, (en un entrenamiento por supuesto), el oponente se hizo a un lado y yo me fui de cara, enterrando la mascara en el lodo.

“Chin.. golpeas como vieja”, dijiste, yo quería golpear, y tenía ganas de decirte lo mucho que yo quería golpear bien, pero si lo hubiera hecho tú me hubieras apachurrado o humillado, pues tú eras tan agresivo que no aceptabas explicaciones.
En la siguiente jugada, “golpeé” y realicé un bloqueo muy bien, ante el mismo oponente, cuando busqué tu comentario, tú estabas platicando con otro coach.

Soy el primero en admitir, que yo era bastante malo y aún cuando hubiera cauchado con técnica, habría sido mal jugador. Yo era uno de esos muchachos que comparado con mis compañeros, iba atrasado un par de años en mi desarrollo físico y de fortaleza.

Allí fue donde la regaste, yo crecí, para cuando salí de la prepa, media 1.98 metros y pesaba 95 kilos, no podía volar, pero podía correr bastante bien.

Aquel débil novato podía ahora lanzar una bola de béisbol más duro que nadie en el Estado y fui contratado por un equipo de béisbol para jugar en las ligas mayores.

Cuando se incremento mi fuerza en la Universidad, los coaches de futbol americano me traían loco pidiéndome que me cambiara de deporte y me fuera al fútbol americano. Yo les dije que no me gustaba ese juego.

Pero porqué no, si eres un jugador de fútbol americano natural” me decían.
“No sé coach, no puedo explicarlo, pero creo que el fútbol americano no es para mí”.

Viendo hacia el pasado, realmente me arrepiento de no haber jugado fútbol americano, pudo haber sido muy divertido, pude hasta haber ayudado al equipo. Pero gracias a tí, me volví en contra del juego, antes de haberme involucrado realmente en él. Un pobre coucheo, muy poco ánimo y quien sabe., a lo mejor nunca llego a descubrir el porqué.

Tu todavía estas allí y te veo couchando con tu apariencia de maldito y duro. Y me pregunto? Cuántos niños atletas en potencia, que están un año, dos o tres atrás en su maduración física, vas a desmotivar éste año? Cuantos de ellos serán victimas de tus burlas?.

Me tomó un tiempo aprender que tu “agresividad” es insignificante. Tú fuiste un muchacho que jugó poco en el segundo equipo de la Universidad, así que, qué te hizo ser tan agresivo?

Que triste. Tú estas en una posición en que puedes hacer mucho bien a muchos niños, pero dudo mucho que lo vayas a hacer, nunca vas a dejar de querer aparentar ser “agresivo” y oírte “agresivo”, y crees que de eso se trata el fútbol americano…

Pero ahora, YO si se de que se trata.

LARRY D. BROOKS.
LINE BACKER.
L.A. RAMS.
SUPER BOWL XIV.